Intro al design thinking

Introducción al Design Thinking

Design thinking o también conocida en español como pensamiento de diseño, es una metodología utilizada por los diseñadores para resolver problemas complejos. Se orienta en la acción, propiciando el avance de la creación que encamina al proyecto a un resultado esperado.

La historia, inicia en los años sesentas, en Estados Unidos nacen los primeros intentos de crear una “ciencia” entorno al diseño. En las década de los ochentas, las nuevas concepciones y prácticas comienzan a cobrar fuerza. Y términos como: Innovación, creatividad y multidisciplinareidad empiezan a usarse en el diseño. En 1991 nace IDEO (compañía global de diseño), y convierte esta metodología en la más utilizada para generar innovación.

Ésta metodología se orienta plenamente en el usuario/cliente. Por lo tanto, la idea de los productos y servicios generados a través del design thinking,  se deben adaptar a las necesidades de las personas, aportando valor a las mismas. 

El resultado que se busca es ahondar en la comprensión del cliente. A través de interacciones, que ayuden a encontrar nuevas perspectivas y al desarrollo de nuevas ideas. Las mismas que se puedan aplicar de manera estratégica para así alcanzar la satisfacción del usuario.

Un ciclo de Design Thinking está compuesto por:

  • La búsqueda de la innovación centrada en la persona.
  • La necesidad de la observación para descubrir las necesidades no satisfechas dentro de un contexto y las limitaciones de una situación particular.
  • La interacción de las soluciones con nuevas ideas, probando y ajustando.
  • La involucración de los usuarios finales, que minimiza la incertidumbre y el riesgo de errores en la innovación
  • El uso de las percepciones, en las que se confía, entendiéndose que complementan los objetivos.

La popularidad del Design thinking, es la capacidad para generar soluciones innovadoras que se adapten a las necesidades de las personas buscando la manera más certera posible. Se convierte en una herramienta que ayuda a aprender, mientras se crean soluciones que se adapten a los usuarios. Además, es viable en la medida que ayuda a reducir los riesgos que van ligados al desarrollo de nuevos proyectos, sin reducir su valor creativo e innovación dentro de la empresa. Pero dime, ¿tú que opinas al respecto?

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